Derecho y justicia

©Copyright. 2005, Javier F. Ramos, Las palabras que nunca te dije.

Me sospecho tu arrepentimiento de haber dicho adiós ayerLa sospecha tiene sus evidencias pero no hay juez ¿Quién podría pues, adjudicar?, declarar la sentenciaEn este drama sin final, donde tu que eras mi ConstituciónNo defendiste el Estado que era nuestro amorYa no hay ministerio público porque todo deja de existirY se volvió abogacía mi verbo, ante los oídos sordosDe tu implacable acusación, carente de evidenciasPero ni a tu favor ni al mío existe Estado de DerechoUn juicio sin ganadores, pues la sentencia implícita esDos perdedores condenados a la cadena perpetua de su orgullo.Hago el intento de encontrar justiciaPero al parecer el terreno común donde formar Un tribunal de apelaciones, es el menos común de los terrenosDonde la guerra se hizo defendiendo los dos Estados apartesY lo que fue caliente, no es hoy más que una guerra fría Entre potencias impotentes de vencer su propio miedoTalvez sea cuestión de tiempo, pero como Trias Monje dijo una vez:“Justicia lenta no es justicia”... Tanta jurisprudencia posee esa historia de viejas Decisiones. Si tan solo contáramos con la valentíaDe mirar atrás. Y hacer enmiendas a nuestros código civil.